"Las apariencias engañan" y el que brille mucho no quiere decir que sea una joya auténtica.
Y es que el refranero nos avisa de muchas formas sobre lo fácil que es engañar y cómo los embaucadores se aprovechan de ello con ejemplos como:
"El hábito no hace al monje", "Obras son amores y no buenas razones" o "Al hombre de dos caras, mal rayo le parta".
Recopilado en: "Más vale refrán en mano... (De abuelos a nietos)" http://educacion-ne.es/refranes.htm