Nacimiento, en 1515, de santa TERESA de JESÚS, religiosa, fundadora de la orden religiosa de las 'carmelitas descalzas', mística y escritora española. Canonizada a poco menos de cuarenta años de su muerte, fue la primera mujer proclamada Doctora de la Iglesia católica en 1970 por Pablo VI.
Junto con San Juan de la Cruz, se la considera la cumbre de la mística experimental cristiana, y una de las grandes maestras de la vida espiritual en la historia de la Iglesia.En el 1895, en un evento para el Fomento de la Industria Nacional de París, los hermanos LUMIÈRE presentan su invento llamado CINEMATÓGRAFO.
Sin embargo, no fueron los inventores del cine, pues el primero en hacer una grabación fue Louis Le Prince que en 1888 realiza La escena del jardín de Roundhay de apenas dos segundos de duración.
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Efemérides literarias Autores del s.XX-XXI en las lenguas españolas (y premios Nobel de Literatura)
Nacidos en este día
- de 1895, la llamada "precursora del libro electrónico" (enlace a la imagen del mismo), Ángela RUÍZ ROBLES maestra y escritora.
Su invento constaba de dos partes: La primera, de conocimientos básicos: lectura, escritura, numeración y cálculo. Haciendo presión en abecedarios y números se formaban sílabas, palabras y lecciones. La segunda funcionaba con bobinas, cada una dedicada a una materia. Y podía incorporar luz y sonido.
Pueden ver la presentación en vídeo:
http://www.rtve.es/alacarta/videos/con-ciencia/ciencia-angela-ruiz-robles/2138256/
Su invento constaba de dos partes: La primera, de conocimientos básicos: lectura, escritura, numeración y cálculo. Haciendo presión en abecedarios y números se formaban sílabas, palabras y lecciones. La segunda funcionaba con bobinas, cada una dedicada a una materia. Y podía incorporar luz y sonido.
El dispositivo de Ángela Ruiz Robles
estaba cubierto por una lámina transparente e irrompible, con cristal
de aumento. E incorporaba, además, una luz, para que se pudiese leer en
la oscuridad. Además, sumaba sonido con las explicaciones de cada tema.
Todo en el tamaño de un libro, «de facilísimo manejo y peso
insignificante», describía la propia autora. (Fuente)
Fallecida el 27 de octubre de 1975, sus obras, escritas entre 1938 y
1946, comprenden un total de dieciséis libros. Sus tres primeros son: Compendio de ortografía castellana, Ortografía castellana y Taquigrafía martiniana abreviada moderna.Pueden ver la presentación en vídeo:
http://www.rtve.es/alacarta/videos/con-ciencia/ciencia-angela-ruiz-robles/2138256/
Uno de los más importantes novelistas y
ensayistas contemporáneos, su obra ha cosechado numerosos premios, entre
los que destacan el Biblioteca Breve (1963), el Rómulo Gallegos (1967),
el Príncipe de Asturias de las Letras (1986), el Planeta (1993), el
Cervantes (1994), y el Nobel de Literatura
2010 —este último otorgado «por su cartografía de las estructuras del
poder y sus imágenes mordaces de la resistencia del individuo, su
rebelión y su derrota»—.
Desde 2011 recibe el tratamiento protocolar de Ilustrísimo Señor al recibir del Rey Juan Carlos I el título de marqués de Vargas Llosa.
Desde 2011 recibe el tratamiento protocolar de Ilustrísimo Señor al recibir del Rey Juan Carlos I el título de marqués de Vargas Llosa.
En 2021 fue elegido miembro de la Academia Francesa para ocupar el asiento número 18 de esa institución.
Vargas Llosa alcanzó la fama en la década de 1960 con novelas tales como La ciudad y los perros (1962), La casa verde (1965) y Conversación en La Catedral (1969). Continúa escribiendo prolíficamente en una serie de géneros literarios, incluyendo la crítica literaria, el periodismo, el ensayo y el cuento.
Vargas Llosa alcanzó la fama en la década de 1960 con novelas tales como La ciudad y los perros (1962), La casa verde (1965) y Conversación en La Catedral (1969). Continúa escribiendo prolíficamente en una serie de géneros literarios, incluyendo la crítica literaria, el periodismo, el ensayo y el cuento.
Entre sus novelas se cuentan comedias, novelas policíacas, históricas y políticas. Varias de ellas, como Pantaleón y las visitadoras (1973) y La Fiesta del Chivo (1998), han sido adaptadas y llevadas al cine.
Últimas obras: Lituma en los Andes (Premio Planeta, 1993), Los cuadernos de don Rigoberto (1997), La Fiesta del Chivo (2000), El paraíso en la otra esquina (2003), Travesuras de la niña mala (2006), El sueño del celta (2010), El héroe discreto (2013), Cinco esquinas (2016), La llamada de la tribu (ensayo, 2018), Tiempos recios (2019), «El hombre de negro» (cuento, 2019), Medio siglo con Borges ( ensayo, 2020), La realidad de un escritor (2020) versión en español de A Writer's Reality (1991), La mirada quieta (de Pérez Galdós) (2022), El fuego de la imaginación: Libros, escenarios, pantallas y museos (2022), Un bárbaro en París: Textos sobre la cultura francesa (2023), Le dedico mi silencio (2023).
Abrió los ojos a las cuatro de la madrugada y pensó: «Hoy comienzas a cambiar el mundo, Florita». No la abrumaba la perspectiva de poner en marcha la maquinaria que al cabo de algunos años transformaría a la humanidad, desapareciendo la injusticia. Se sentía tranquila, con fuerzas para enfrentar los obstáculos que le saldrían al paso. Como aquella tarde en Saint-Germain, diez años atrás, en la primera reunión de los sansimonianos, cuando, escuchando a Prosper Enfantin describir a la pareja-mesías que redimiría al mundo, se prometió a si misma, con fuerza: «La mujer-mesías serás tú». ¡Pobres sansimonianos, con sus jerarquías enloquecidas, su fanático amor a la ciencia y su idea de que bastaba poner en el gobierno a los industriales y administrar la sociedad como una empresa para alcanzar el progreso! Los habías dejado muy atrás, Andaluza.
Se levantó, se aseó y se vistió, sin prisa. La noche anterior, luego de la visita que le hizo el pintor Jules Laure para desearle suerte en su gira, había terminado de alistar su equipaje, y con Marle-Madeleine, la criada, y el aguatero Noél Taphanel lo bajaron al pie de la escalera. Ella misma se ocupó de la bolsa con los ejemplares recién impresos de La Unión Obrera; debía pararse cada cierto número de escalones a tomar aliento, pues pesaba muchísimo. Cuando el coche llegó a la casa de la rue du Bac para llevarla al embarcadero, Flora llevaba despierta varías horas. (Fragmento inicial de El paraíso en la otra esquina)
Últimas obras: Lituma en los Andes (Premio Planeta, 1993), Los cuadernos de don Rigoberto (1997), La Fiesta del Chivo (2000), El paraíso en la otra esquina (2003), Travesuras de la niña mala (2006), El sueño del celta (2010), El héroe discreto (2013), Cinco esquinas (2016), La llamada de la tribu (ensayo, 2018), Tiempos recios (2019), «El hombre de negro» (cuento, 2019), Medio siglo con Borges ( ensayo, 2020), La realidad de un escritor (2020) versión en español de A Writer's Reality (1991), La mirada quieta (de Pérez Galdós) (2022), El fuego de la imaginación: Libros, escenarios, pantallas y museos (2022), Un bárbaro en París: Textos sobre la cultura francesa (2023), Le dedico mi silencio (2023).
Abrió los ojos a las cuatro de la madrugada y pensó: «Hoy comienzas a cambiar el mundo, Florita». No la abrumaba la perspectiva de poner en marcha la maquinaria que al cabo de algunos años transformaría a la humanidad, desapareciendo la injusticia. Se sentía tranquila, con fuerzas para enfrentar los obstáculos que le saldrían al paso. Como aquella tarde en Saint-Germain, diez años atrás, en la primera reunión de los sansimonianos, cuando, escuchando a Prosper Enfantin describir a la pareja-mesías que redimiría al mundo, se prometió a si misma, con fuerza: «La mujer-mesías serás tú». ¡Pobres sansimonianos, con sus jerarquías enloquecidas, su fanático amor a la ciencia y su idea de que bastaba poner en el gobierno a los industriales y administrar la sociedad como una empresa para alcanzar el progreso! Los habías dejado muy atrás, Andaluza.
Se levantó, se aseó y se vistió, sin prisa. La noche anterior, luego de la visita que le hizo el pintor Jules Laure para desearle suerte en su gira, había terminado de alistar su equipaje, y con Marle-Madeleine, la criada, y el aguatero Noél Taphanel lo bajaron al pie de la escalera. Ella misma se ocupó de la bolsa con los ejemplares recién impresos de La Unión Obrera; debía pararse cada cierto número de escalones a tomar aliento, pues pesaba muchísimo. Cuando el coche llegó a la casa de la rue du Bac para llevarla al embarcadero, Flora llevaba despierta varías horas. (Fragmento inicial de El paraíso en la otra esquina)
- de 1970, Cristina CERRADA, escritora y profesora de escritura creativa, española.
Su carrera literaria ha obtenido reconocimientos desde su inicio: su cuento Tránsito obtuvo el XIII Pedro Atarrabia de relato 2001, y en 2003 su cuento Órdenes trascendentales resultó ganador del Premio NH en el apartado «Mejor cuento presentado independientemente».
Su primer libro publicado fue Noctámbulos, en 2003, colección de cuentos.
En los últimos años ha obtenido el premio de novela Ateneo Joven de Sevilla por Calor de Hogar, S.A. (2005) y el premio Caja Madrid de Narrativa 2004.
Su carrera literaria ha obtenido reconocimientos desde su inicio: su cuento Tránsito obtuvo el XIII Pedro Atarrabia de relato 2001, y en 2003 su cuento Órdenes trascendentales resultó ganador del Premio NH en el apartado «Mejor cuento presentado independientemente».
Su primer libro publicado fue Noctámbulos, en 2003, colección de cuentos.
En los últimos años ha obtenido el premio de novela Ateneo Joven de Sevilla por Calor de Hogar, S.A. (2005) y el premio Caja Madrid de Narrativa 2004.
Otras obras: Compañía (relatos, 2004). Alianzas duraderas (2007). La mujer calva (2008). Anatomía de Caín (2010), Cenicienta en Pensilvania (novela corta, 2010) , Adversidad (2015), Cosmorama (2015), Europa (2017), Hindenburg (2020), 660 mujeres (relatos, 2021), La maestra de Stalin (2022).
Cuando Diana se hubo ido estuve durante un tiempo dándole vueltas a la idea de la muerte. Tenía la impresión de que no iba a poder sobrevivir. Hasta me tragué un tubo de tranquilizantes cuando ella me dejó, pero me puse tan nervioso que los vomité. Fue una locura. Llevaba un par de días solo en casa, sin noticias suyas. Me dolían la cabeza y los dientes, como si fuera a volverme loco, y no dejaba de vomitar. Estaba asustado. Me atormentaba la idea de no saber dónde localizar a Diana en caso de tener que comunicarle algo importante. Qué estupidez. Ahora que me había dejado, ¿qué podía tener que comunicarle? ¿Que habían llamado de la consulta del dentista para cambiar su cita del próximo mes? ¿Que había muebles rebajados en los almacenes Delorian´s? ¿Que no sabía usar el microondas? ¿O quizás que volvían a emitir su serie favorita por televisión?
Ella había prometido que me llamaría al llegar adonde quiera que pensase instalarse en su absurda huída de mí. Durante días fui de un lado a otro de la casa con el teléfono en la mano. Me pasaba el día esperando que sonase para oír su voz. Había planeado lo que iba a decirle. Unas veces me decidía por abrirle mi corazón, eso tendría que funcionar. Ensayaba muy en serio, como si se tratase de una interpretación para una prueba teatral. En un arranque de ternura al cual, suponía, ningún ser humano podría sustraerse, ella me diría que me amaba, que no podría amar nunca a otro, y volvería a mi lado. Cuando tales pensamientos habían conseguido aliviarme, no me cabía duda alguna de que Diana era humana, de que se ablandaría. Durante unos instantes me animaba. Iba a preparar café, o revisaba mi trabajo, moviéndome por la casa con los delicados movimientos de Diana, imitándola. Qué disparate. (Fragmento de 'Calor de Hogar, S.A.')
Cuando Diana se hubo ido estuve durante un tiempo dándole vueltas a la idea de la muerte. Tenía la impresión de que no iba a poder sobrevivir. Hasta me tragué un tubo de tranquilizantes cuando ella me dejó, pero me puse tan nervioso que los vomité. Fue una locura. Llevaba un par de días solo en casa, sin noticias suyas. Me dolían la cabeza y los dientes, como si fuera a volverme loco, y no dejaba de vomitar. Estaba asustado. Me atormentaba la idea de no saber dónde localizar a Diana en caso de tener que comunicarle algo importante. Qué estupidez. Ahora que me había dejado, ¿qué podía tener que comunicarle? ¿Que habían llamado de la consulta del dentista para cambiar su cita del próximo mes? ¿Que había muebles rebajados en los almacenes Delorian´s? ¿Que no sabía usar el microondas? ¿O quizás que volvían a emitir su serie favorita por televisión?
Ella había prometido que me llamaría al llegar adonde quiera que pensase instalarse en su absurda huída de mí. Durante días fui de un lado a otro de la casa con el teléfono en la mano. Me pasaba el día esperando que sonase para oír su voz. Había planeado lo que iba a decirle. Unas veces me decidía por abrirle mi corazón, eso tendría que funcionar. Ensayaba muy en serio, como si se tratase de una interpretación para una prueba teatral. En un arranque de ternura al cual, suponía, ningún ser humano podría sustraerse, ella me diría que me amaba, que no podría amar nunca a otro, y volvería a mi lado. Cuando tales pensamientos habían conseguido aliviarme, no me cabía duda alguna de que Diana era humana, de que se ablandaría. Durante unos instantes me animaba. Iba a preparar café, o revisaba mi trabajo, moviéndome por la casa con los delicados movimientos de Diana, imitándola. Qué disparate. (Fragmento de 'Calor de Hogar, S.A.')
Fallecidos en esta fecha
- de 1942, Miguel HERNÁNDEZ, poeta y dramaturgo español nacido un 30 de octubre de 1910.
Aunque tradicionalmente se le ha encuadrado en la generación del 36,
el autor mantuvo una mayor proximidad con la generación anterior hasta
el punto de ser considerado por Dámaso Alonso como «genial epígono de
la generación del 27».
En 1925 empieza a formar un improvisado grupo literario junto a otros
jóvenes de
Orihuela en torno a la tahona de su amigo Carlos Fenoll. Entre los
principales participantes en aquellas reuniones José Marín Gutiérrez,
futuro abogado y ensayista que adoptaría el seudónimo de «Ramón Sijé».
El 25 de marzo de 1931, con tan sólo 20 años,
obtuvo su primer y único premio literario de su vida concedido por la
Sociedad Artística del Orfeón Ilicitano con un poema de 138 versos
llamado Canto a Valencia bajo el lema Luz..., Pájaros..., Sol...
En 1933 se publica Perito en lunas,
su primer libro. Viaja a Madrid buscando trabajo dos veces, y logra primero ser
nombrado colaborador en las 'Misiones Pedagógicas' y más tarde lo escoge
como secretario y redactor de la enciclopedia Los toros su
director y principal redactor, José María de Cossío, que será en
adelante su más ferviente entusiasta. Colabora además con asiduidad en Revista de Occidente y mantiene una tórrida relación con la muy liberada pintora Maruja Mallo, que le inspira parte de los sonetos de El rayo que no cesa.
Se presenta a Vicente Aleixandre y hace amistad con él y con Pablo Neruda;
este es el origen de su breve etapa dentro del Surrealismo. Su poesía
por entonces se hace más social y de
compromiso político con los más pobres y desheredados.
En diciembre de
1935 muere su fraternal amigo de toda la vida, Ramón Sijé, y Hernández le dedica su extraordinaria Elegía, que provoca el difícil entusiasmo de Juan Ramón Jiménez en una crónica del diario El Sol.
En la Guerra Civil viajó a la Unión Soviética en representación del
gobierno de la República, de donde regresó en octubre para escribir el
drama Pastor de la muerte y numerosos poemas recogidos más tarde en su obra El hombre acecha.
En diciembre de 1937 nace su primer hijo, Manuel Ramón, que muere a los pocos meses y a quien está dedicado el poema Hijo de la luz y de la sombra y otros recogidos en el Cancionero y romancero de ausencias. En enero de 1939 nace su segundo hijo, Manuel Miguel, a quien dedicó las famosas Nanas de la cebolla.
Escribe un nuevo libro: Viento del pueblo, y en abril de 1939, concluida la guerra, ya se había terminado de imprimir en Valencia El hombre acecha. Aún sin encuadernar, una comisión depuradora franquista, presidida por el filólogo Joaquín de Entrambasaguas,
ordenó la destrucción completa de la edición. Sin embargo, dos
ejemplares que se salvaron permitieron reeditar el libro en 1981.
Es
apresado y desde la cárcel de Sevilla lo trasladaron al penal de la
calle Torrijos en Madrid (hoy calle del Conde de Peñalver), de donde,
gracias a las gestiones que realizó Pablo Neruda
ante un cardenal, salió en libertad inesperadamente, sin ser procesado,
en septiembre de 1939.
Vuelto a Orihuela, fue delatado y detenido y ya
en la prisión de la plaza del Conde de Toreno en Madrid, fue juzgado y condenado a muerte en marzo de 1940.
José María de Cossío y otros intelectuales amigos, entre ellos Luis
Almarcha Hernández, amigo de la juventud y vicario general de la
Diócesis de Orihuela
(posteriormente obispo de León en 1944), intercedieron por él y se le
conmutó la pena de muerte por la de treinta años de cárcel.
Pasó a la
prisión de Palencia en septiembre de 1940 y en noviembre, al Penal de
Ocaña (Toledo). En 1941, fue trasladado al Reformatorio de Adultos de Alicante, donde compartió celda con Buero Vallejo.
Allí enfermó: padeció primero bronquitis y luego tifus, que se le
complicó con tuberculosis. Falleció en la enfermería de la prisión
alicantina a las 5:32 de la mañana del 28 de marzo de 1942, con tan sólo
31 años de edad.
No salieron jamás /del vergel del abrazo. /Y ante el rojo rosal /de los besos rodaron. /Huracanes quisieron /con rencor separarlos. / Y las hachas tajantes / y los rígidos rayos. /Aumentaron la tierra /de las pálidas manos. / Precipicios midieron / por el viento impulsados / entre bocas deshechas. / Recorrieron naufragios, / cada vez más profundos /en sus cuerpos, en sus brazos. /Perseguidos, hundidos / por un gran desamparo / de recuerdos y lunas, / de noviembres y marzos, / aventados se vieron / como polvo liviano: /aventados se vieron, / pero siempre abrazados. (Fragmento de 'Cancionero y romancero de ausencias', pdf)
- de 1962, Hugo WAST, seudónimo de Gustavo Adolfo Martínez Zuviría, fue un escritor y político argentino nacido un 23 de octubre de 1883.
Simpatizante del franquismo español, fue ministro de Educación en 1944, durante la dictadura del general Pedro Pablo Ramírez e instauró en su país la enseñanza ordinaria, aunque no obligatoria, de la religión católica en todas las escuelas.
En 1902 salió su primera novela, Alegre, que vería la luz tres años más tarde. Escribió también teatro, poesía y ensayo, defendiendo el creacionismo del dogma católico ante la teoría de la evolución.
Simpatizante del franquismo español, fue ministro de Educación en 1944, durante la dictadura del general Pedro Pablo Ramírez e instauró en su país la enseñanza ordinaria, aunque no obligatoria, de la religión católica en todas las escuelas.
En 1902 salió su primera novela, Alegre, que vería la luz tres años más tarde. Escribió también teatro, poesía y ensayo, defendiendo el creacionismo del dogma católico ante la teoría de la evolución.
Entre sus últimas obras: Lo que Dios ha unido (1945), Aventuras del padre Vespignani (1948), Morir con las botas puestas (1952), Estrella de la tarde (1955), ¿Le tiraría usted la primera piedra? (1955), Año X (1960) y Autobiografía del hijito que no nació (póstuma, 1961).
200 Años Después de Voltaire
El 30 de mayo de 1978 fray Plácido de la Virgen se acostó tan fatigado que a duras penas alcanzó a rezar las letanías con que terminaba su rosario, y se durmió profundamente.
Debió parecerle deliciosa la tabla del camastro en que se tendía vestido conforme a la regla, y blando el leño mal desbastado de su almohada.
Estaba sin embargo en la edad en que el sueño es arisco, y el insomnio un compañero habitual. Había nacido el primer día del siglo XX; tenía pues 78 años. Su jornada comenzaba antes de la medianoche; el rezo de su breviario y algunas devociones le llevaban tres horas largas; la misa, media hora; el confesionario, a veces una hora, a veces cuatro o cinco o más si venían muchos penitentes que hablaran en latín o castellano, únicos idiomas que él conocía, ya que nunca pudo ni quiso aprender el esperanto, la lengua universal desde 1960.
A media mañana recibía las visitas de los que necesitaban sus consejos o sus socorros, en seguida del almuerzo frugalísimo de los gregorianos que seguían la regla de la Trapa; después un rato de lectura espiritual —que se convertía a menudo en una breve siesta— y todas las demás distribuciones de la comunidad. Salía poco, o más bien nada, de aquel viejísimo caserón que era su convento. (Fragmento inicial de 'Juana Tabor').
200 Años Después de Voltaire
El 30 de mayo de 1978 fray Plácido de la Virgen se acostó tan fatigado que a duras penas alcanzó a rezar las letanías con que terminaba su rosario, y se durmió profundamente.
Debió parecerle deliciosa la tabla del camastro en que se tendía vestido conforme a la regla, y blando el leño mal desbastado de su almohada.
Estaba sin embargo en la edad en que el sueño es arisco, y el insomnio un compañero habitual. Había nacido el primer día del siglo XX; tenía pues 78 años. Su jornada comenzaba antes de la medianoche; el rezo de su breviario y algunas devociones le llevaban tres horas largas; la misa, media hora; el confesionario, a veces una hora, a veces cuatro o cinco o más si venían muchos penitentes que hablaran en latín o castellano, únicos idiomas que él conocía, ya que nunca pudo ni quiso aprender el esperanto, la lengua universal desde 1960.
A media mañana recibía las visitas de los que necesitaban sus consejos o sus socorros, en seguida del almuerzo frugalísimo de los gregorianos que seguían la regla de la Trapa; después un rato de lectura espiritual —que se convertía a menudo en una breve siesta— y todas las demás distribuciones de la comunidad. Salía poco, o más bien nada, de aquel viejísimo caserón que era su convento. (Fragmento inicial de 'Juana Tabor').
- de 1995, Isidoro VALVERDE ÁLVAREZ, marino, escritor y periodista español nacido el 12 de febrero de 1929.
Estudió Derecho en la Universidad de Murcia, obteniendo el premio extraordinario de Licenciatura en 1952;.
Estudió Derecho en la Universidad de Murcia, obteniendo el premio extraordinario de Licenciatura en 1952;.
Tras aprobar la oposición al
Cuerpo Jurídico de la Armada, ingresó en la Escuela Naval Militar de
Marín en 1953 y posteriormente se graduó en Periodismo en la Escuela
Oficial de Periodismo de Madrid en 1971. Posteriormente, diplomado en orientación
familiar por el Instituto de Ciencias de la Educación de la Universidad
de Navarra en 1975.
Entre sus obras: El Cantón murciano, 1973. Seis Cartageneros (Discursos), 1976. Las desventuras del Efesé y alguna que otra ventura, 1982. La Actividad Naval Militar (influencia en su entorno), (co-autor, 1990) . El Lago, mi nostalgia, 1993.
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